Gracias a la colaboración del grupo de amigos de “Jardín de la Inmaculada” se puede llevar adelante el mantenimiento de áreas, una de las más urgentes es la denominada Poza de la Isla, donde se sitúa la isla dentro del curichi de la entrada frente a la capilla interna.
El pasto y la maleza cubre rápidamente el área por tener una buena concentración de humedad, pero con dedicado trabajo se va avanzando en la obra de limpieza y mantenimiento.