Por lo menos cada tres veces al año, se hace necesario el mantenimiento en el corte de pasto, poda y mantenimiento de áreas, difícil de mantener a no ser de los pequeños aportes que ofrendan los grupos, personas e instituciones. Gracias a ese mantenimiento se evitan la invasión de maleza y animales que pudieran ser perjudiciales para la convivencia. De nuevo a los bienhechores muchas gracias y bendiciones.
La Obra de Dios y su Madre la Inmaculada encuentra dificultades, pero con esa misma bendición de Dios se puede posible.