A fines del 2020 el camino a Pereotó era más que difícil, siendo un año de mucha lluvia y teniendo pendiente varios trabajos de inicio era más que imposible el acceso por Portachuelo por lo que se solicitó de la ayuda externa para la compra de una movilidad que garantizara el acceso.
Cuando no fue posible mientras tanto se buscó un acceso alterno por la Bélgica tomando el camino de Urubó Norte, un camino largo pero espectacular por el paisaje, un verdadero paseo.